Una de las cosas dignas de observar en nuestra tierra es el agua en todas sus manifestaciones, así es que vamos a disfrutar este fin de año, de este mágico y valiosísimo elemento de la naturaleza.
Nuestra base, Calatayud. Ciudad tranquila y acogedora, bañada por el río Jalón.
Los restos de sus cinco castillos y su casco histórico nos hablan de un pasado en el que convivieron las culturas árabe, judía y cristiana.
Pasearemos por sus calles y conoceremos sus monumentos más representativos.
Nuestro objetivo: pasar el último día del año 2016 en un lugar mágico, El Monasterio de Piedra, donde la principal protagonista es el agua con sus caprichosas manifestaciones...
Hay de todos los tipos: con mucho caudal, con mucha pendiente, más reposadas, con árboles, con poco agua, con peces..., e incluso con una cueva interior, como es la cascada Cola de Caballo, la más conocida de todas.
Un derroche de belleza que nunca olvidaremos.
¡¡Toca zambullirse en la naturaleza más pura!!